martes, 11 de mayo de 2010

El Volcán Eyjafjallajokull

V O L C Á N e n E R U P C I Ó N
por Enrique Liccardi Sañudo
El área afectada por la nube volcánica procedente de Islandia se movería el miércoles 12 de mayo hacia el noroeste atravesando la Península Ibérica rumbo al sudeste de Francia, dijo la agencia europea de supervisión aérea Eurocontrol. La ceniza se movería a gran altura y no afectaría el funcionamiento de los aeropuertos, agregó Eurocontrol. La nube de cenizas ya afectó el sur y el centro de España, así como a Portugal, incluida las islas Canarias.


Todos los aeropuertos de Canarias, excepto el de Las Palmas, estaban cerrados el martes por la mañana, lo mismo que algunos de Marruecos. Las áreas de grandes concentraciones de cenizas en altitudes altas en medio del Atlántico Norte se estaban dispersando, mejorando la situación de los vuelos transatlánticos. La agencia dijo que espera que el martes se realicen unos 29.000 vuelos, cifra cercana a lo normal para esta parte del año. El lunes hubo 29.155 vuelos.
Europa lleva semanas sometida a reiterados cierres del tráfico aéreo, desde que el volcán en erupción bajo el glaciar Eyjafjallajokull, en Islandia, comenzó a despedir ceniza en abril. En tanto, en Marruecos varios aeropuertos estaban cerrados el martes al aproximarse la nube de cenizas al noroeste de Africa, según informó el Ministerio de Transporte local. Las cenizas volcánicas son abrasivas y pueden afectar las superficies aerodinámicas y paralizar el motor de un avión.También pueden dañar los circuitos electrónicos y los parabrisas de las aeronaves.

DESASTRE ECOLOGICO

Derrame de petróleo fuera de control.
Por Enrique Liccardi Sañudo
La British Petroleum informó que el esfuerzo más reciente por contener el derrame es un "sombrero" que los ingenieros colocarán el jueves 13, sobre la principal tubería por la que sale crudo.

British Petroleum (BP) anunció ayer otro plan experimental para recoger el crudo que se está derramando de un pozo a 5.000 pies de profundidad en el Golfo de México, mientras las autoridades de Luisiana se preparan para la posible llegada de una enorme mancha de petróleo a lo largo de las pantanosas costas del estado.Las cuadrillas llenaban sacos de arena, las embarcaciones camaroneras colocaban barreras de contención y se alertó a helicópteros y dragas para atacar por tierra, aire y mar la mancha de petróleo, que cubre miles de millas cuadradas y será difícil de limpiar si llega a los frágiles pantanos de la costa de Luisiana.
Los directivos de BP informaron que el esfuerzo más reciente por contener el derrame es un "sombrero" que los ingenieros tratarán de colocar el jueves sobre la principal tubería por la que sale crudo. El petróleo recogido se bombearía entonces a una barcaza en la superficie.La estrategia es similar al fallido intento de BP durante el fin de semana de colocar una enorme represa encofrada de acero y hormigón de 78 toneladas, del tamaño de un edificio de cuatro pisos, sobre la tubería y fondo adentro del mar. El sombrero de cuatro pies de diámetro y cinco pies de largo es mucho menor.Los directivos de BP dijeron que eso evitaría la formación de hidratos que hicieron fracasar el intento anterior al obstruir su abertura y crear un efecto de flotación suficiente que impidió un sello hermético.Para estar más seguros, el sombrero será tratado con agua caliente y se le inyectará metanol, un solvente cuyo uso bajo agua requiere la aprobación de la Dirección Ambiental Federal.
Los ingenieros de BP planean dar seguimiento a esa operación con la inyección a presión de neumáticos y bolas del golf trituradas, así como cuerdas con nudos, para obstruir la salida del pozo y contener la fuga de crudo. Sin embargo, este plan posiblemente no se implemente hasta dentro de dos semanas.Mientras tanto, frente a las costas de Luisiana la mancha de crudo es observada con la atención que usualmente se reserva para los huracanes.
El presidente de los EEUU quiere endurecer la legislación sobre compensaciones por daños en caso de derrames de petróleo, que actualmente limita esos pagos a 75 millones de dólares. El anuncio coincide con la comparecencia, prevista para hoy, de altos funcionarios de las empresas British Petroleum, Transocean y Halliburton, que han de rendir cuentas en el Senado sobre el derrame de crudo en el Golfo de México, que amenaza con convertirse en el peor de la historia de los Estados Unidos. Los ejecutivos comparecerán ante el Comité de Energía y Recursos Naturales.